lunes, 21 de julio de 2008

Colocio

(Sust. Del latín cum = reunión, cooperación y locus = lugar)

Lugar en el que se dejan objetos que no tienen un lugar fijo.

En las casas, las oficinas, los talleres y los depósitos puede existir un método para ordenar cada objeto que se va incorporando: si es un repasador, va al cajón de los repasadores. Si es un alimento, va a la alacena. Si es un libro, a la biblioteca.
Pero existen objetos que no tienen un lugar definido y se van acumulando de manera heterogénea sobre la mesa o dentro de un cajón. Esos objetos pueden ser: pequeños artefactos rotos, botones, facturas que están por vencer, papelitos con propagandas sobre eventos que nos interesan, tickets de compra de supermercados, souvenires de fiestas a las que hemos asistido, una moneda rara que apareció sin explicación.
Cualquier lugar de la casa donde nuestra pereza ha decidido instalar esos objetos -en principio, provisionalmente-, es un colocio.

El colocio es el primer indicio de domicidio.

7 comentarios:

Sandra Strikovsky (Strika) dijo...

Sólo como dato cultural: en francés la palabra coloc (que es apócope de colocataire) se usa para designar a la persona con la que compartes casa o apartamento (en inglés roommate o housemate).
Saludos

gabrielaa. dijo...

ay
adolezco de colocios múltiples

unServidor dijo...

Y yo adolezco de colocios móviles...

¿Dónde cuernos se guardan los ganchos de la abrochadora? ¿y la misma abrochadora? ¿las gomitas, los clips...? ¿los cd vírgenes? ¿los descuentos? ¿la armónica?
Todo está un día en un sitio, otro en otro.

Temo vivir en un gran colocio urbano al que vinieron a parar las sobras del primer mundo.

Elizabeth Auster dijo...

Los que queremos conservar nuestra fama de ordenados, cada tanto despejamos el colocio y metemos todo en una caja, donde impera el mismo desorden, pero contenido.
Unser: los ganchos de la abrochadora van en su caja, preferentemente cerca de la abrochadora, y todo eso en un rincón del escritorio. Los cd's vírgenes, cerca de la computadora, la armónica en la mesa junto al sillón donde se sienta a armoniquear sus penas. Para los descuentos, una carpetita lejos del alcance de sus hijas. Nos leemos en el próximo episodio de "Mi colocio, tu colocio".

Franco dijo...

Mux: le acabás de poner nombre a mi cuarto.

Además, habría que designar una palabra para el lugar donde van las medias perdidas. Tengo como tres medios pares... y voy por más!

Ivy dijo...

uuuuuuu, justo q te firmo el otro y ahora leo esta;

la casa de mi amiga es un colocio enorme tons

y yo tbn tengo muchos medios pares de medias, como Franco, así que desde hace tiempo me caracterizo por usar medias distintas; así q cuando compro pares nuevos tiro una (naaaa, sería muy boluda, pero sí las sigo usando intercambiadas)

besos desde Tucumán!

Mily dijo...

Antes de tener un Colocio me enfrentaba diariamente a la misma pregunta: ¿dónde habré dejado esto? ¿dónde habré guardado lo otro?(vale aclarar que "esto" y lo "otro", eran de esos objetos sin lugar definido). Es sumamente efectivo!cada vez que no se encuentra algo, seguro que está en "el tercer cajón", al que a partir de ahora llamaré "mi colocio".