martes, 10 de mayo de 2011

Calalocos

(Adjetivo. De calar, en su acepción de 'comprender un motivo secreto' y loco)

Quien aparenta tener una gran intuición para descubrir si una persona padece algún desequilibrio mental.

El calalocos manifiesta que es capaz de darse cuenta, mucho antes de tener un diálogo o un indicio revelador, si el almacenero, el plomero, un desconocido que cruza a lo lejos por la calle o su propia esposa, han enloquecido. A través de señales discutibles y poco concluyentes, el calalocos expone con certeza su impresión de que Carlitos está muy perturbado, y que esa locura "ya estaba presente" desde muchas décadas atrás, aun cuando no se había manifestado de manera pública. En rigor, para el calalocos, dos o tres indicios de excentricidad (mover mucho los ojos, hablar en voz baja, mirar el cielo, respirar profundo o comer lechuga sin vinagre) le bastan para extraer su apurada conclusión: "A esta mina ya la tengo calada, y está rayadísima. Toma café sin azúcar y se ducha durante casi una hora. Pero esto no es de ahora, ¿eh? Hace diez años fue mi compañera en el instituto, y ya en ese momento tomaba leche sin azúcar"
A veces el calalocos se siente en la obligación de confrontar al supuesto desequilibrado, haciéndole ver que sus ideas o acciones no son propias de una persona normal. Cuando hace esto, cree que está cumpliendo un rol social inestimable: "Le tuve que decir a María que está cada día más loca, que no puede andar haciendo gimnasia aeróbica a las seis de la mañana. Le recomendé que vaya a ver a un psiquiatra. Si no se lo decía, un día va a ser peor, va a agarrar un hacha y nos va a matar a todos"

1 comentario:

Pipistrela dijo...

Un psiquiatra o psicólogo sería un calaloco entonces? Me irrita que algunas palabras empiezen con "Ps". Son propensas al escupitajo.