miércoles, 21 de diciembre de 2011

Horizorexia

(Sustantivo. Del griego horizónta = línea del horizonte y oréxis = apetito, hambre)

Necesidad de un panorama amplio y espacioso donde poder mirar a lo lejos. 

Los habitantes de las grandes urbes suelen quejarse de la desaparición del horizonte por culpa de las construcciones apretadas. Apenas pueden vislumbrar un trozo recortado y aleatorio de cielo, porción que incluso está sujeta a ulteriores y caprichosos cercenamientos. El hombre urbano encuentra su mirada bloqueada por la solidez opaca, ortogonal y superpuesta del paisaje edilicio. Su vista nunca puede perderse a lo lejos: añora convertirse en un erémoro, alguien cuyos ojos jamás se posan en las inmediaciones mundanas. A partir de esa modesta imposibilidad (ver el horizonte a sus anchas), siente que su espíritu está aprisionado y sospecha que le ha sido obturada una posibilidad maravillosa de su propia naturaleza. El horizonte lejano y un paisaje monótono otorgan la sensación de infinitud y magnificencia. La disposición amontonada de paredones y torres, en cambio, despierta una ligera desesperación y un suave estado depresivo.

La horizorexia es pariente de la agororexia (Del griego ágora = espacio abierto) y de la eremorexia (Del griego erémos = desierto). La agororexia es la contrapartida exacta de la agorafobia. En cierto modo, el claustrofóbico es un agororéxico.

2 comentarios:

Nimbusaeta dijo...

No creo que el tener pánico a los sitios cerrados conlleve tener gusto por los espacios abiertos, pero bueno, supongo que de ahí el "en cierto modo" :P

Pues cuando leí solo el título pensé que la definición sería "ganas de estar en posición horizontal", como cuando quieres tumbarte en el sofá o en la cama pero no para dormir, sino solo para estar en esa cómoda postura.

Jorge Mux dijo...

Nimbusaeta: no había pensado en esa posibilidad. Creo que legítimamente debería ser parte del significado de la palabra.