jueves, 20 de mayo de 2010

Magnivoquio

(Sustantivo. Del latín magnus = grande y vocare = llamar)

En un discurso, apelar a una persona importante o a una institución que está más allá del auditorio al que se dirige el discurso.

"Gracias a todos, gracias", dice un periodista que ha recibido un premio. Sus colegas, bajo el estrado, lo aplauden. "Con esta distinción quiero dirigirme a la presidenta de la nación: por favor, que cuide a los periodistas porque tenemos miedo", agrega el premiado. La presidenta no está presente, y no tiene por qué escuchar ese discurso: se trata de un magnivoquio, una errónea apelación a una autoridad o a alguien que no puede escuchar directamente, ni tiene por qué hacerse cargo de lo que se le dice. "Y por favor, señor Papa, su Santidad, deje de ocultar la pederastia", puede agregar el magnívoco periodista. "Y ya que estamos, Arcángel Gabriel, no me molestaría que se me apareciera alguna vez y así yo también puedo tener una revelación", acota. "A la población china, le digo: por favor, dejen de emigrar hacia el resto del mundo que ya está bastante superpoblado. Y a los extraterrestres que merodean nuestro planeta, especialmente a los chupacabras: nunca les daremos nuestros recursos, sépanlo. Nada más, compañeros periodistas. Estoy orgulloso de haber recibido este premio."

4 comentarios:

Marisa dijo...

Desde este humilde lugar cedido a los comentarios, quiero pedirle a la humanidad toda que tenga en cuenta este trastorno en el que suele caer. Y este llamado tiene como destinatarios especiales a Mirtha Legrand, a Juan Perugia, a la misma presidenta de nuestra nación. Todos vosotros, en mayor o menor grado, habéis caído bajo el influjo del magnivoquio; notadlo, y vuestras vidas mejorarán sin duda. Muchas gracias.

Anónimo dijo...

Y quiero decirle a ese periodista... si a vos, que siempre te tengo presente porque alguna vez curtiste (posta) con la chica que salí unos meses hace ocho años...
Es bueno que tengas miedo, chichipío magnívoco...
Gracias...

El violinista desaforado dijo...

Pongo a Dios como testigo de lo mucho que me hizo reír esta definición.

Ricardo dijo...

"...especialmente a los chupacabras..."

GE-NIAL.

Me hiciste reir mucho. Te lo agradezco.