![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSXsjT-LZBRDGtoUH_caLhOci9_RAFviyy_7YId9DAEb6Ex3tqHp2iA_1BCphEtu7xKSY4dkUAT7tcQJ443qf-ndYqM2UNwmCf9r2ZVFgQsEo4eqZTaeuS9qaGM9QIRJ3s3TOgwW2sPHmh/s200/empanada.jpg)
Esta acción puede extenderse a otros alimentos: facturas, confituras de todo tipo, cortes de carne, bebidas, etc. También puede valer para casos menos concretos, no relacionados con la comida: "pipear" a una mujer significa "invitar mujeres poco atractivas a una reunión, desentenderse de ellas y tratar de acercarse a la novia o amante de alguno de los presentes". También vale para un brainstorming: si se está pensando en un proyecto creativo -por ejemplo, una publicidad- pipear equivale a tirar cuatro o cinco ideas muy malas o impracticables, y tomar como propia una buena idea ajena. El pipeador suele decir, en estos casos, "se nos ocurrió a nosotros", cuando en realidad su aporte, si bien no fue nulo, fue inoperante.
(Gracias Pablo Leotta)
2 comentarios:
He conocido pipeadores que se toman la única gaseosa de los chicos (mía) pese a habérsela dado de cervecero.
También se de pipeadores de sánguches de miga que se rehabilitaron cuando los pedidos pasaron a ser uniformes, íntegramente de jamón y queso.
El pipeador de parrila suele pedir pollo o chinchulines y portergar la ingesta de tales consumibles hasta que se tornan incomibles.
Abrazo, Mux.
¡ODIO a los pipeadores! Para evitarlos voto por pedidos homogéneos.
Publicar un comentario