miércoles, 25 de junio de 2008

Sofema

(Sust. Del griego Sophía = sabiduría)

Expresión o proposición que parece ser muy profunda, pero que en el fondo enuncia una trivialidad.

Suele entenderse que la filosofía consiste en una multitud inconexa de frasecitas lapidarias y redundantes, cuyo objetivo final es lograr una convicción en quienes sean capaces de entender el "significado profundo" de la expresión. En realidad, esas frases son quitadas de contexto, malinterpretadas, mal traducidas y peor enunciadas, las cuales, en su contexto adecuado, tenían una verdadera función arquitectónica en ciertos sistemas, pero que cuando alguien las repite ocasionalmente sólo provocan fastidio y desconcierto. "Primero piensa, luego existes", le dice una persona a la otra emulando a Descartes, frase con la cual quiere pedirle a su interlocutor que piense antes de actuar. Ese sentido -"piensa antes de actuar"- no puede ser más ajeno al pensamiento de Descartes, quien con su fórmula cogito ergo sum quería expresar la interdependencia básica entre la existencia y el pensamiento. Pero, cuando se la utiliza como sofema, la frase se dice -con errores- en un contexto inadecuado, y con la intención de parecer ilustrado o profundo. Otros sofemas filosóficos son "El ser es, el no ser no es", "Dios es una idea de la razón", "La nada nadea", "De lo que no se puede hablar, es mejor callarse", "Sólo sé que no sé nada", "Conócete a ti mismo".

Quitados de su contexto original, los sofemas son frasecitas ramplonas cuyo contenido semántico queda poco claro, y en el fondo sólo actúan por la fuerza persuasiva de cierto reconocimiento social e histórico.

Por culpa de quienes difunden sofemas, la filosofía suele parecer una actividad de personas redundantes cuyo pasatiempo es elaborar enunciados breves y crípticos de significado casi nulo.

El sofema debe distinguirse del sofisma en importantes aspectos. Un sofisma es un argumento con el cual se quiere persuadir a alguien de algo falso. El sofema no tiene intención de difundir falsedades con apariencia de verdad; el sofema es simplemente un enunciado quitado de contexto, cuya descontextualización le hace perder todo su peso semántico.

4 comentarios:

Iota dijo...

Genial, Jorge. Me hace acordar a "lo real es racional y lo racional es real" o a la famosísima frase jaidegueriana "somos recién cuando somos de vidrio".

P.D.: hice un post sobre esta entrada.

The Bug dijo...

Lo que no entiendo es que haya ilustrado la definición con el busto del sobrino, de "El Tío y el Sobrino".
Es cuanto menos curioso.

Anónimo dijo...

Este blog es el resplandor de la verdad.

unServidor dijo...

¡Del Exonario a la RAE!
Cuando empecé a leer la definición, recordé a mis compañeros de trabajo, para los cuales Descartes dijo que piensa y luego (en el sentido de "después") existe (y no que piensa y "por lo tanto" existe). ERGO iba a comentarlo... pero ya está en el mismo post.
Así que ahora estoy caliente y pido que Mux especifique con un fibrón grueso el límite entre el sofema y la perogrullada.

Bueno, bueno. Puede ser después de la Tesis...
;P