(Sust. Del inglés bargain = oferta, ganga)
Tendencia a comprar productos que están en oferta.
El barganismo puede ser una tendencia compulsiva: no sólo se compra lo que está en oferta, sino porque está en oferta -o porque se anuncia como tal-, sin importar si el producto ofrece alguna utilidad o si, consecuentemente con la -supuesta- rebaja ha habido una disminución de calidad. Se sufre de barganismo compulsivo cuando, ante una mesa de saldos o de productos rebajados se experimenta una incontenible desesperación por llevarse todo y por abrirse paso entre otros barganistas.
Como tendencia no compulsiva, el barganismo es una actitud de estudiado cálculo económico: cuando alguien va al supermercado y decide su dieta de acuerdo a los productos rebajados, también cae en el barganismo. Mientras el barganista compulsivo dirige la mirada hacia cualquier objeto en oferta, el barganista concienzudo sólo elige lo que necesita y no se aparta de su riguroso método.
2 comentarios:
Hay un caso curioso de barganismo: el de mi vieja.
Ella sólo es barganista con la plata ajena, cuando uno le encarga que compre algo.
Si la plata es de ella despilfarra sin problemas.
Ya me parecía que "gangoso" se aplicaba a otra gente...
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