viernes, 25 de junio de 2010

Esquepóbata

(Adjetivo. Del griego skepé = techo y batés = andante. Sustantivo: esquepobacia)

Dícese de quien tiene la costumbre de andar a la altura de los techos y las cornisas. 

Existen oficios y profesiones que involucran la esquepobacia. Técnicos de servicios telefónicos y de cable, antenistas, techistas y ladrones incluyen la incluyen entre sus actividades cotidianas.
Sin embargo, el término se refiere con mayor propiedad a quien acostumbra dar paseos para curiosear por los tejados con ánimo de antropólogo trotamundos y cosmopolita. El esquepóbata hace excursiones por azoteas ajenas y las espía libremente, sin juzgar ni robar a sus vecinos y sin reparar en las limitaciones impuestas por muros y alambrados. A pesar de que cada techo, paredón y cornisa forman parte de una propiedad privada, él los recorre sin hacer distingos territoriales: a la altura de las gárgolas no hay celosos guardianes, y el espacio de las marquesinas y azoteas puede compartirse con palomas y gatos.  
Los niños sienten un inmenso placer por trepar paredones y caminar al ras de las cornisas. Cuando son adultos siguen sintiendo el mismo placer, pero evitan esa práctica porque suele generar suspicacias y malinterpretaciones.

1 comentario:

José Pepe Parrot dijo...

Es cierto lo que dice: cuando era chico me dedicaba a la Esquepobacia. Luego de grande me dediqué a algo parecido pero legitimado (más o menos) socialmente: el montañismo.
¿Qué otra cosa es el montañismo sino esquepobacia sublimada?