viernes, 21 de mayo de 2010

Vandalismo semántico: cagatrochas

Muchos ya estarán al tanto de que el Instituto Cervantes ha lanzado un concurso de palabras inventadas (ver esta nota).
La intención final es crear un "Ficcionario" con las palabras que la gente envíe, y la idea parece ser que ganará la palabra que reciba más votos de los lectores.
El proyecto es idéntico al de Exonario, de modo que me interesó bastante la propuesta. Participé con tres palabras: "Colocio", "Irenofagia" y "Equicopcio". Dado que este proyecto se llama "Ficcionario", es de esperar que las palabras sean ficticias en el sentido propio del término: palabras inventadas, que se refieran a un hecho real o posible, pero que tengan una completa funcionalidad semántica en el idioma español.
Sin embargo, me encontré con que este concurso tiene muchos errores.

1. En primer lugar, los participantes ingresan palabras ya existentes, que se usan en las variedades dialectales de sus pueblos. Por ejemplo, la palabra que lidera los votos es "Cagatrochas", un término que  -tal como se encargan de aclarar los comentaristas y el propio "autor"- se usa en algunos pueblos de España. Pero aun más: ni siquiera se cuidan de que el término no aparezca en el diccionario. Algunas palabras no sólo se usan, sino que ya están definidas por la Real Academia (ver Vagamundo) Si bien hay un proceso de selección de términos, parece que entre los criterios de la selección no está presente la consigna de que sean "ficticios", y en rigor, ni siquiera "fuera del diccionario". El nombre, entonces, "Ficcionario" es inadecuado.

2. En segundo lugar, quienes envían palabras no se sienten en la obligación de definirlas, (Por ejemplo: Cagatrochas: "es como decir que eres un cobarde, miedoso, caganio,..."; Obesionado: "Porque representa muy bien la "obsesión" que tenemos hoy en día por ser obesos") o incluso de respetar la gramática española. Por ejemplo,"Majoni", la segunda palabra más votada, es un "derivado del adjetivo majo pero en grado superlativo". Sin embargo, de acuerdo a la formación del superlativo en español, no existe regla de derivación que dé como resultado un superlativo terminado en "ni". Se trata, entonces, no de una nueva palabra, sino de una modificación de la gramática del superlativo para un caso puntual.
Algo similar ocurre con la palabra "Serpientón", quinta en este ránking. Un serpientón es "una serpiente bien grande venenosa y muy peligrosa". No es un nuevo término; es el aumentativo de un término ya existente.

3. Tampoco hay un intento por referirse a una realidad que hasta el momento no tuviera nombre. Los términos más votados no son más que sinónimos de otros términos, o simplemente se trata de combinaciones bastante burdas de otros términos ya existentes. En todos los casos, las definiciones (cuando las hay) son escasas y poco rigurosas. El propio caso de "cagatrochas" es un ejemplo en estos tres sentidos.

4. No parece haber otra instancia de selección más que el voto. Esto provoca algunas consecuencias indeseadas: En lugar de palabras ficticias, se termina votando a las palabras que más se usan en una determinada región. Otros, en cambio, votan porque les gusta el sonido del término, aun cuando la palabra ya exista de antemano. Por eso, palabras verdaderamente originales tienen muy pocos votos. Si el objetivo era crear un "ficcionario", los organizadores deberían fiscalizar y seleccionar mediante algún jurado cuál consideran que es "la mejor" palabra. Y cuando digo "la mejor", me refiero a que cumpla con todos los criterios esperables en una palabra nueva.

En fin. Con este post, tenía la intención de pedirles a los lectores de Exonario que votaran por alguna de las tres palabras que propuse (Aquí los links: Colocio, Irenofagia y Equicopcio ), pero el concurso me ha decepcionado. Así que ahora me da lo mismo.
Gracias y feliz fin de semana largo.

(PD: Les agradezco especialmente a mis amigos El Violinista y Jorge Benítez, quienes me informaron de este concurso)

6 comentarios:

OPin dijo...

Noto cierto enojo y decepción en tu nota, cuando pienso que en realidad deberías alegrarte que no te puedan llegar ni a los talones.
Aguante Mux ¡¡¡

JuanMan dijo...

Lástima... El término "ficcionario" incluso parece estar mal definido (o mal empleado) por sus "autores"... Me quedo con el Exonario, entonces.

yerbanohay dijo...

Hace mucho que el instituto Cervantes la pifia bastante. Yo fuí a una velada literaria adonde los poemas tenían errores de sintaxis y errores de ortografía. Son una institución burocrática cualquiera.

AlanR. dijo...

Señor Mux, acabo de pasar por la página del concurso, y en este momento, la palabra que se encuentra en tercer lugar es "infinito".
Si alguien es tan amable de explicarme como esa palabra es ficticia (como sugiere el título del concurso) me haría un gran favor. Esto es inquietante, ¡aguante el exonario carajo!

Saludos, Alanr.

Anónimo dijo...

Mi casa esta llena de estos! llena!

Agos

El Día E dijo...

Hola Jorge

Es cierto que se han admitido muchos términos que son localismos y que entran en el Ficcionario porque no están recogidos en la RAE. Dado que sólo disponemos de dos categorías -palabras reales e inventadas- decidimos admitir estos localismos entre las últimas, aunque técnicamente no se trate de palabras nuevas, como bien señalas.

En próximas ediciones de El Día E trataremos de subsanar este problema, y tal vez dedicar un apartado exclusivo a palabras de uso común pero sin reconocimiento de la RAE.

En cuanto a los votos, es cierto que existe una tendencia de los visitantes a votar las palabras que más les recuerdan a su lugar de origen. Ahí poco podemos hacer: hay un puñado de excelentes términos inventados en la página pero los designios de la democracia son inescrutables.

Gracias por tu atención y participación,

El Día E