Dícese de quien infringe las normas en el límite entre lo permitido y lo no permitido.
Un liminfractor actúa de manera tal que siempre queda la duda acerca de si infringió la norma o no. A veces es claro que la norma fue infringida, pero el infractor apela a correr ligeramente los límites, o a hacer más gruesa la línea que divide lo permitido de lo no permitido, o a ver las cosas desde una perspectiva en la cual los límites no están tan bien definidos o su leve transgresión no tiene graves consecuencias.
Ejemplos de liminfractores: quienes cruzan un semáforo en amarillo-casi-rojo; quienes patean la pelota mientras suena el silbato que da por terminado el partido o quienes golpean a una persona hasta dejarle moretones tenues y fácilmente confundibles.