martes, 4 de octubre de 2011

Misonusergia

(Sustantivo. Del griego misos = odio, nous = mente y ergon = trabajo. Adjetivo: misonusérgico)

Desprecio por el trabajo intelectual.

Quienes se dedican a tareas que implican lectura de libros, redacción de textos, investigación científica, creación artística y docencia se enfrentan muchas veces con el juicio de los otros, para quienes esas actividades no significan un trabajo. "No vayas a la escuela hoy, parece que hay picos y palas. No sea cosa que te pongan a trabajar", dice un cínico misonusérgico. Según su hipótesis, si no se puede visualizar un producto material, sólido, inmediato y ostensible, no se estuvo trabajando. Horas de escritura frente a una computadora son un simple pasatiempo; no se puede comparar con la labor de un cocinero o un albañil: un plato de comida o una pared califican mejor como productos del esfuerzo laboral que el ordenamiento de unos pocos bits en un software, o la dudosa adquisición de conocimiento mediante un libro. "¿Estás cansado? ¿De qué? Si te pasaste el día frente a la computadora. ¡En cambio yo, trabajé todo el día embotellando soda en la distribuidora!", se queja un misonusérgico, creyendo que nadie puede cansarse por estar pensando o tipiando durante horas. Es famosa la misonusergia de un ministro de economía quien, ante el reclamo salarial de los científicos de su país, respondió: "vayan a lavar los platos", dando a entender que las tareas domésticas son un trabajo mucho más legítimo y meritorio que la investigación.
No debe confundirse la misonusergia con la crítica a la impostura intelectual. Existen muchos esnobs intelectuales, que fingen apego a ciertas actividades intelectuales con el solo propósito de escapar de tareas más comprometidas, o simplemente para impostar interés por el arte y la ciencia. Por culpa de ellos a veces el trabajo intelectual tiene muy mala fama.  Es muy difícil trazar la línea entre quienes realizan un trabajo intelectual auténtico y quienes lo hacen sólo por esnobismo.
Sin embargo no es necesario el esnobismo para desatar la misonusergia. Hay personas que se de dedican a investigar la aparición del término "ananke" en la poesía ditirámbica griega durante el siglo VI antes de Cristo o el cambio de pensamiento de Wittgenstein entre los años 1929 - 1936 en lo que respecta a la configuración lógica del mundo, o la tristeza que sintió el dios Urano al descubrir que uno de sus hijos lo iba a destronar. Quienes escuchan estas investigaciones pueden preguntarse: "¿Y para qué demonios sirve estudiar eso?". Es verdad que un trabajo intelectual demasiado puntual, específico y cuyo objeto es una palabra antigua, un proceso mental de alguien que murió hace décadas o las emociones de un dios de un panteón mitológico parecen absurdas y poco auténticas comparadas con otras investigaciones más abarcativas y de mayor significación social. Pero eso no las convierte en ilegítimas si se las practica con seriedad y entusiasmo.

3 comentarios:

José Pepe Parrot dijo...

He sufrido la misonusergia toda la vida.
Hay una variación que se usaba en mi pueblo, de alguna forma alabando el laburo intelectual: decían los viejos "-Andá a estudiar o vas a terminar laburando la tierra".

Entre nos: ya salió la revista. Apenas pueda se la envío. Es un numerote, le aviso.

Ricardo dijo...

Así me decía mi misonusérgico padre cuando chico: ¡largá los libros y andá a jugar a los autitos!

Jorge Mux dijo...

Dormidano: qué bueno lo de la revista. La espero con ansiedad.