![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxlKypqmymNsxNv8d6EBavjgGBnryQusxyfyDHtb0Z2F5WLVf40yQHBRZq_kGpKwyAUFovZC_5XCFO-iTxjSP5uRL8OE4zYKlRMfciY5crkTqT7Avy1L7JsUUlusS3-5YhT496nPTpEiTx/s320/pisar.articulo.jpg)
Sensación de pisar algo blando, viscoso e inesperado.
La dureza del camino le imprime una regularidad a nuestros pasos, pero de vez en cuando se cruza una araña, una cucaracha o la deposición de un perro y sentimos una textura incongruente bajo nuestras suelas que nos causa repugnancia.
Pero no necesitamos que haya algo repulsivo para sentir tupocolco. Si pisamos una media, o un ovillo de lana, o una frutilla, tendremos una impresión similar: la vibrante resistencia de algo que se interpone entre el zapato y el suelo, transmitiéndonos asépticamente los crujidos de su destrucción a través de la media.
2 comentarios:
Fa, qué level,jajaaj jugás con las lenguas madres y todo!
muy bueno eh!
esaaa profe! je
Publicar un comentario