
Aceptar una pequeña pérdida o estafa para no sufrir una pérdida o estafa mayor.
Cualquier comportamiento mafioso es un ejemplo de microclepsia: se aceptan ciertas condiciones impuestas por el arbitrio de un grupo o una persona, para no padecer males mayores.
Las empresas aseguradoras, las obras sociales y los sindicatos, aun cuando no tuvieran comportamiento mafioso, ejemplifican este concepto.
En otra acepción más afín con la etimología del término, la microclepsia es el hurto discreto, de proporciones mínimas y a veces consentido. Estos casos suelen ser marginales y nunca queda bien establecido si se trata de un robo o de un derecho del hurtador. Ejemplos: los jabones de los hoteles, los sobres de mayonesa de los restaurantes, las monedas del vuelto del supermercado de nuestra abuela.
¿No es este, acaso, el principio del capitalismo?
ResponderEliminarUnos pocos le roban un poquito a muchos.